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Después de perder mi terror tecnológico con el Facebook, me lanzo a la aventura definitiva, el plasmar mis vivencias, recuerdos y en otras ocasiones aventuras imaginarias. En este blog sin mas preámbulos, os doy a todos la bienvenida a este rincón del guerrero consciente.

domingo, 6 de mayo de 2012

GENIN V



Eran las ocho menos diez de la mañana, estaba saliendo de la boca de metro y ya en la acera mire a todas partes y no vi nada, me explico, estaba en el centro de Madrid aquello era un maremagnum de vehículos viandantes y edificios, pero yo se suponia que tenia que presentarme en la base donde iba a comenzar el curso de selección a las ocho en punto de ese dia,  y en ese lugar no habia ningun cuartel confirme la dirección y estaba en el lugar, un portal que no se diferenciaba en nada o en casi nada de los demas por que observando atentamente, frente a la boca del metro tenia enfrente un edificio tipo mazacote, tipica construcción de los años 60 para alojamiento de los trabajadores que junto a sus familias emigraban a Madrid desde Avila o Soria, en busca de algun futuro en la incipiente industrialización tardofranquista.
Ese edificio no tenia ningún cartel de se vende ni publicidad ni habia tiendas en sus bajos ,,,, nada, ni siquiera tenia portero automatico, en el centro de su fachada habia un tunel de acceso a un patio interior donde estaban aparcados bastantes turismos siempre recordare que habia en las paredes del tunel mas de 20 jaulas en las que multitud de periquitos y canarios piaban histericamente Me dije que ese tenia que ser el lugar simplemente por eliminación, dado que evidentemente un edificio muy normal no era, mientras entraba por el tunel de entre los periquitos surgio como una aparición, un tipo de unos 50 años y vestido de paisano, el cual me detuvo en seco en el centro del tunel y me identifico, comenzo en ese momento un infierno de cuatro meses de duración que comenzamos diez compañeros, aunque no todos lo terminaron cuatro fueron descartados, y dos renunciaron al mismo, de manera que solo tres hombres y una mujer terminamos el curso de selección-formación.
Era un curso de técnicas operativas de inteligencia, con un objetivo, seleccionar Agentes que pudieran soportor cualquier presión sin derrumbarse mentalmente, y que al mismo tiempo fueran capaces de hacer cualquier cosa, y me refiero a CUALQUIER COSA, desde robar un perro de raza en mitad del campeonato de “agiliti” patrocinado por Royal Canin, a torturar a un individuo en un interrogatorio o disfrazarse de jugador del Barça para entrar en un edificio público.

  Y en eso consiste el meollo de la selección, el quedarse con Agentes dispuestos a darlo todo a cambio de nada, por un ideal, ya sea patriotico, de justicia o de superación personal. Hay diferentes motivaciones para diferentes personas, pero una vez que seleccionas a las personas adecuadas tienes que adiestrarlas, pero ya sabiendo que seran capaces de hacer el trabajo, da igual cual sea ese trabajo, y ese es un secundario segundo objetivo del curso. El transformarnos en técnicos en el arte de la fotografia encubierta, en seguimientos, es decir la vigilancia permanente de objetivos sin que estos se percaten de que estas observando todo lo que hacen en su miserable vida, o cosas mas sutiles y bastante delicadas como el aprender a arreglartelas para adoptar una identidad falsa, el asumirla completamente y resultar creible con ella.
En el curso las practicas siempre se llevaban a las situaciones extremas de manera que aprendieramos a ejecutar las técnicas en el entorno mas dificil posible, y al mismo tiempo colocarnos siempre en el mismo borde de nuestra resistencia mental y fisica. Por ejemplo, en la fotografia encubierta tenias que fotografiar o grabar en video a un supuesto objetivo, que iba a salir de una merceria y a pie se dirigia a su coche por un tramo de acera recta de 15 metros, luego se subia al vehículo y se marchaba, tu tenias esos 15 metros de oportunidad para quedarte con su imagen. Desde el interior del maletero de un Ford Taurus cerrado y que por supuesto llevaba varias horas aparcado al sol contigo dentro, enfocando al viandante con tu camara en una posición absurda tumbado de mediolado entre las dos botellas, la del agua y la de tus orines, con el pantalon algo manchado pues es muy dificil que no se produzcan malolientes fugas cuando orinas en esa posición en el interior de una botella en posición horizontal, por no hablar de ese profundo y sincero dolor que nace en tu encorvada espalda, pues asi y a traves del centro vaciado  de la   O de la matrícula de Logroño, (si un agujero disimulado en la matricula) tenias que  fotografiar al tio.
Las prácticas de seguimientos también eran por llamarlo algo espectaculares, en equipos reducidisimos, pues ya he dicho los pocos alumnos que eramos, teniamos que mantener la vigilancia sobre una perona que presuntamente iba a mantener una importante reunión con alguien en alguna parte de Madrid, teniamos que ir todo el dia detrás del objetivo hasta que tuviese la reunión, obtener pruebas gráficas de la misma, y cuando esta finalizase seguir al interlocutor de nuestro objetivo hasta que nos llevara a su casa, o como minimo hasta la matricula de su coche con el fin de poder identificarlo pues en esos casos nuestros queridisimos instructores-objetivos, se pasaban varias horas cambiando de un vehiculo a otro y de un medio a otro por todo el sistema de transporte público de Madrid, de un autobus a otro, luego tomaba un taxi, que paraba en una boca de metro y se subía a la linea 1, y nosotros como puta por rastrojo, relevandonos constantemente detrás de el, para que no “detectase” nuestra presencia, de manera que a lo mejor nos veiamos en la necesidad de adelantar al metro por superficie un par de compañeros y aparecer en el siguiente anden al que iba a llegar el tren del objetivo, y subirnos a el tranquilamente como si no pasara nada, con la camisa empapada en sudor los pantalones medio caidos, y la zapatilla izquierda desatada, pues despues de bajar del coche camuflado en mitad del atasco, has corrido 2 kilometros esquivando a los hombres-anuncio de compro oro, a las amas de casa de casa con el carrito y a los jubilados con el caniche, te has resbalado mientras bajabas como un poseso por las escaleras mecanicas antes de frenar en seco en mitad del anden, simulando tener todo el tiempo del mundo para subir al vagón, que en ese momento esta saliendo de la oscuridad del tunel.
Y es que a menos que tengas un equipo operativo de 30 hombres para ejecutar un seguimiento, de forma que se puedan hacer relevos constantes y nadie llege a girar dos esquinas detrás del objetivo, lo imprescindible es que el equipo tenga capacidad de camuflaje en el entorno y de hacerse con coberturas, es decir de poder justificar con naturalidad tu presencia en un lugar, y entonces es cuando nos caracterizabamos de vendedores ambulantes, de barrenderos, o de cualquier cosa, recuerdo en una de esas practicas de adquisición de coberturas, como nos registraron y nos quitaron nuestra documentación y todo nuestro dinero, nos subieron a un coche y nos dejaron solos en diferentes bocas de metro de Madrid, con la orden de mendigar en el acceso a esa estación, invertir lo que obtuviesemos en paquetes de “kleneex”, y vender esos mismos pañuelos en ese lugar.
Eran ejercicios que parecian ( y seguramente lo eran en la realidad), diseñados por un psicotico con sentido del humor.
 Podria contar miles de anecdotas, un viernes por la mañana nos dijeron que teniamos que realizar a lo largo del fin de semana una practica por parejas, que consistia en la vigilancia de un “buzón”, (este buzón no es el del portal de nuestra casa que nos atasca con recibos el Banco, que es el único que hoy en día sigue mandando cartas), me refiero al lugar preestablecido, en el cual el jefe de un comando de ETA intercambia documentos con la dirección de la organización, este lugar lo escoje el jefe del comando y dibuja un plano de acceso, junto con una pequeña redacción explicativa respecto a la localización, y esto se le hace llegar al correo  de la organización que sera el responsable de una vez al mes, acudir a ese lugar para depositar o recoger instrucciones el buzón tiene que estar en un lugar de facil localización, pero al mismo tiempo en un paraje aislado. La explicación que redactaria el terrorista por ejemplo seria; en la N-121 sentido Pamplona, pasado el pueblo tal de la segunda curva nace un camino de tierra, en ese camino a 200 metros de la curva hay un caserio en ruinas, pues dejame los sobres debajo de un ladrillo junto al arbol que hay en el patio del caserio. Si se quiere utilizar para dejar bolsas con armas y explosivos, el metodo que siguen los criminales es el mismo, pero excavando un zulo en el lugar señalado.
A partir de ese momento en la noche del día que corresponda, que puede ser primer lunes de mes, el jefe del comando acude al buzón para comprobar si le han dejado algo, de la misma manera, si el quiere transmitir alguna información a sus jefes pues 24 horas antes “carga” el buzón con una nota personal, que el correo no puede leer el se limita al transporte.
Como decia el viernes nos entregaron a mi compañero y a mi un sobre con un plano de localización del buzón, y las consabidas explicaciones para localizarlo debiamos encontrar el buzón y establecer una vigilancia permanente sobre el mismo durante todo el fin de semana, fotografiando a todo el que accediese al mismo y tratar de seguirle.Nos entregaron el material que era una camara y dos walkis dentro de un Seat Ibiza blanco e interpretando el plano nos dirijimos a Valdemoro por la carretera de Andalucia, estaba todo bastante bien explicado, asi que, no nos costo demasiado encontrar el sitio, una garrafa de plastico semienterrada junto a un roble marcado nada menos que con una x pintada de verde en el centro de una explanada, sin ninguna vida vegetal mas, ni casas, ni nada, no se puede ni describir era un paramo rural en las proximidades de la N-IV, en el que no había ni casas ni cultivos ,,,,,,,vamos en la puta nada, automaticamente nos quedamos los dos mirando, haber como demonios se podia vigilar eso durante 48 horas y pasando desapercibido claro, en un lugar en el cual un gato callejero llamaria la atención, asi que como el ejercicio comenzaba por la noche decidimos dividirnos, mi compañero tenía que conseguir una pala, y yo volveria al lugar con un toldo, un plastico grande o algo así, el plan era excavar a unos cincuenta metros del arbol un hoyo suficiente para que uno de nosotros pudiese permaneceer en el interior durante 24 horas, (ya que nos relevariamos la noche del sabado) y a ras de suelo, sobre nuestro cuerpo colocar el plastico oculto bajo parte de la tierra que extrajesemos, ese era el unico camuflaje posible en ese entorno, mientras uno mantenia la observación directa en el agujero con la camara y un walki, el compañero estaria en el coche enlazado por radio con el agujero atento a la via de servicio, en cuanto el hoyo “cantara” que habían cargado el buzón, el coche tenia que ponerse tras el vehiculo que saliese de esa zona y seguirlo, parece facil verdad, pues no lo fue.
 Fin del capítulo V de "Genin".
En Valencia (España), a Mayo de 2012.
Ernesto.

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